Conclusión Antec Twelve Hundred V3

Antec ha decidido actualizar su Twelve Hundred con la revisión V3 para alargar su vida. Para nosotros esta decisión es más que correcta, ya que si algo funciona muy bien, ¿porqué quitarlo de en medio cuando puedes actualizarlo con pequeños retoques y alargar su vida útil?

El diseño de la Antec Twelve Hundred V3 es atractivo, a nosotros nos ha encantado, pero nos consta que a cientos de miles de usuarios a lo largo del mundo también. La mezcla entre aspecto gaming y elegante llama mucho la atención. La iluminación LED azul que incorpora es un complemento, que lejos de hacer el chasis estridente le hace más bonito.

Las dimensiones de este chasis son más que correctas. Es de tamaño torre con todo que ello conlleva, pero las medidas no son excesivas en ninguno de los ejes. La profundidad es la justa para que quepa no sobresalga de ningún escritorio, la altura contenida, nos permite igualmente colocarlo bajo casi cualquier mesa.

Una vez conocido el sistema de refrigeración de la Twelve Hundred, nos queda claro, que Antec comenzó el diseño de la misma pensando en generar un flujo de aire que permita refrigerar perfectamente todos y cada uno de los componentes del sistema. Gracias a los tres ventiladores frontales que introducen aire y los tres que lo extraen el aire se garantiza que el objetivo del fabricante se cumpla. Además, se pueden añadir opcionalmente otros dos ventiladores más para mejorar aún más las zonas más calientes de nuestro ordenador. Todos los ventiladores son regulables en velocidad, con lo que el flujo podemos reforzarlo donde consideremos necesario sin perjudicar mucho el ruido. En cualquier caso, a las mínimas revoluciones, se garantiza una correcta refrigeración de todos los componentes.

Internamente, Antec propone un correcto sistema para gestionar el cableado, permitiendo pasar los cables por detrás y evitando así que queden por en medio y dificulten la ventilación o la instalación de otros componentes. Otro punto a favor de la Twelve Hundred V3, es el hueco para la instalación del disipador de la CPU, que aunque para muchos usuarios, esto es irrelevante, para otros muchos resulta algo muy interesante. También nos ha gustado bastante el sistema de racks para discos duros, ya que al ser extraíbles es más sencillo intercambiarlos o instalar nuevas unidades.

En resumen, ya conocíamos de oídas y teníamos buenas sensaciones en relación a la Antec Twelve Hundred V3, pero poder probarla y tenerla delante nos ha hecho certificar lo que pensábamos. El Antec Twelve Hundred V3 es una excelente chasis en el que apenas encontramos puntos negativos. El precio en tiendas ronda los 160-170€.

Por todo ello, otorgamos el premio de producto recomendado a la Antec Twelve Hundred V3.



Agradecemos a Antec el habernos cedido el producto para su análisis: