Conclusión Gigabyte GA Z77X UP7

La Gigabyte GA-Z77X-UP7 es una placa base realmente completa, ideal para aquellos usuarios interesados en realizar overclocking, usar múltiples tarjetas gráficas, romper records o simplemente basar su sistema en una placa con una robustez y fiabilidad llevadas al extremo.

El fabricante se ha esforzado muchísimo en crear una distribución de componentes efectiva, que se adapte lo mejor posible a cualquier tipo de usuario. Serán los usuarios más exigentes los que saquen partido a sus características, ya que los cinco slots PCIe 16x o diez puertos SATA no los aprovechará todo el mundo. Un detalle que nos ha gustado especialmente es la distribución de las seis conexiones para ventiladores, ya que están colocados en puntos estratégicos donde los chasis suelen tener huecos para pasar los cables por la parte trasera. Otro aspecto interesante es el uso de puertos de alimentación SATA en los extremos de la placa para configuraciones multiGPU (en otros fabricantes hemos visto conectores molex en medio de la placa, cosa que es un engorro).

Los colores con los que se adorna la GA-Z77X-UP7 son especialmente llamativos, si bien podrían no ser del agrado de todo el mundo, estamos seguros de que a los amantes del overclocking, gamers y modders les encantará.

Como no podía ser de otra manera, la placa ha dado la talla a la hora de realizar overclocking. Subir el i7 2600k de 3.5Ghz a 4.8Ghz ha sido una tarea realmente sencilla. Un aspecto a destacar es la buena capacidad de recuperación ante configuraciones erróneas, en todos los casos un simple reinicio solucionó el problema. En nuestro caso, el sistema de refrigeración de la CPU se limitaba a un disipador de alta calidad pero gama media; será cuando los usuarios utilicen refrigeraciones líquidas o nitrógeno cuando la Z77X-UP7 pueda demostrar realmente todo su potencial.

En la sección en la que hablamos de la BIOS, ya adelantamos que la distribución era correcta y que venía bien disponer de los modos 3D y avanzado. También hicimos una crítica dura con la compatibilidad de la BIOS y los periféricos USB externos con que las probamos, ya que además de no funcionar con ellos, se ralentizaba el arranque de todo el sistema (tenemos constancia de que este problema se repite con otros modelos de placa de la misma marca). Gigabyte debería ponerse a trabajar de forma urgente en el tema de las BIOS, ya que no es de recibo que unas placas con una calidad tan alta y con un diseño tan sumamente cuidado queden marcadas por una mala implementación de software.

En cuanto a la calidad se refiere, la tecnología Ultra Durable 5 asegura un funcionamiento perfecto bajo las condiciones más duras y durante muchísimo tiempo. En este aspecto Gigabyte lleva unos años, bajo nuestro punto de vista, liderando el mercado, ya que los componentes de alta calidad son la seña de identidad de la marca.

Agradecemos a Gigabyte el habernos cedido el producto para su análisis: